En un contexto donde el comercio online experimenta un auge sin precedentes, impulsado por cambios profundos en hábitos de consumo y estilos de vida, las empresas minoristas se enfrentan a un desafío crucial: transformar su presencia online en una herramienta poderosa que no solo impulse las ventas, sino que también revolucione la logística de entrega.

La dramática evolución de la crisis climática está alarmando tanto a personas como empresas, que buscan desesperadamente formas de reducir su huella de carbono para contribuir a la sostenibilidad del planeta. Además de innovaciones como la logística verde, en el campo logístico también se está comenzando a implantar la llamada economía circular.

Como empresa, nuestra labor y una de nuestras nuevas responsabilidades es defender una producción y una logística interna sostenible, que no sea enemiga de la naturaleza, sino que la respete. Los cambios para poseer un negocio cuyo impacto ambiental sea el mínimo posible comienzan desde dentro, analizando y aprobando políticas que reduzcan los niveles de contaminación y la huella de carbono que se crea al fabricar un producto.

El desarrollo dinámico del comercio electrónico y el número de operaciones logísticas involucradas en el cumplimiento de los pedidos y envíos están aumentando a la par. Cada producto debe ser embalado y entregado en tiempo record y de la manera más eficiente posible. Y aunque las compras en línea son muy convenientes para los clientes, pueden tener un impacto negativo en el medio ambiente. El objetivo de este artículo es presentar los principales desafíos de la logística verde en e-commerce y examinar la influencia de estas prácticas en la satisfacción y lealtad del cliente.